¿Qué gafas de natación comprar?


Autor: A. Hernández

2. Introducción:

A la hora de comprar unas gafas siempre nos hemos planteado algunas cuestiones que de no ser acertadas, podrían darnos ciertos dolores de cabeza. Elegir las gafas más adecuadas, según nuestros objetivos, es todo un reto que hace dudar incluso a nadadores experimentados.

El nadador novel casi siempre adquiere erróneamente sus primeras gafas de natación en supermercados no especializados o tiendas "de todo a 100", con la consiguiente decepción "acuática", porque no ajustan bien, entra agua, son demasiado oscuras o no tienen ángulo de visión, entre otras deficiencias.

Tamaño gafas de natación

Imagen 1

A pesar de ser un elemento esencial del equipo de cualquier nadador, algunas personas no se toman el tiempo necesario para comparar la amplia variedad de tipos de gafas que ofrece el mercado. Se deben considerar aspectos como la forma de las gafas, el tamaño, el color de la lente, el material de construcción y, por supuesto, el precio. Así pues, la primera recomendación indispensable es probarse varios modelos y marcas de gafas antes de comprarlas, igual que si estuvieras comprando un pantalón o unos zapatos.

Antes de evaluar cada uno de estos aspectos, es necesario pensar en su funcionalidad, es decir, el tipo de gafas que usemos dependerá de la actividad que vamos a desarrollar en el agua y de nuestros objetivos. Así, deberemos elegir unas gafas determinadas si practicamos natación en el mar o en la piscina. En el caso de las piscinas hay que tener en cuenta sin son cubiertas o están al aire libre, o si vamos a practicar buceo o jugar un partido de hockey subacuático, por ejemplo.

3. La forma y el tamaño:

prueba de succion gafas de natación

Imagen 2

Existen cientos de formas y tamaños, que van desde las más pequeñas para la natación de competición, como las típica gafas suecas , a las más grandes, también llamadas máscaras, para buceo o submarinismo (ver imagen 1). Las pequeñas están diseñadas para ajustarse a los ojos y hacer que ofrezcan una menor resistencia al avance en el agua, sin embargo, pueden llegar a ser incómodas tras un uso prolongado o dejar marcas en el contorno del ojo. Las grandes poseen un ángulo de visión mucho más amplio lo que las convierte en una opción más adecuada para uso recreativo o de buceo.

Una vez determinado el tamaño y la forma, lo primero es asegurarse que estos dos parámetros se ajustan cómodamente a la cuenca del ojo o al contorno facial, ya que en cada persona es distinto, comprobando que la superficie que tiene contacto con la piel se adhiere unos segundos al contorno de los ojos, sin la sujeción de las gomas, es lo que algunos llaman la "prueba de succión" (ver imagen 2 y vídeo).

Otros elementos que deberemos tener en cuenta a la hora de comprar unas gafas son que el puente entre ambas lentes sea extensible o ajustable para que encajen bien las gafas en la cuenca del ojo y no rocen el puente nasal o nasión de tu cara. También examinaremos la goma o correa de las gafas para que sea fácilmente ajustable alrededor de nuestra cabeza.

4. Materiales de construcción de las gafas de natación:

Desde los inicios de las gafas de natación, sus materiales de construcción han sufrido cambios muy importantes, especialmente desde el descubrimiento del plástico en 1860. Las primeras gafas de natación, según la "International Swimming Hall of Fame", se remontan al siglo XIV, y estaban construidas con conchas pulidas y unidas mediante grasa. Desde entonces, las gafas de natación han cambiado sustancialmente gracias a los procesos industriales actuales con la aplicación de las últimas tecnologías químicas y ópticas.

En los años 70 salieron al mercado las gafas de plástico con el sellado de espuma. Fueron muy populares pero tenían varios inconvenientes, entre ellos, la poca capacidad de estanqueidad y la facilidad de proliferación de hongos debido a que es un material que absorbe el agua.

Parte de gafas de natación

Posteriormente se comercializaron las gafas de neopreno que solventaban algunos de los problemas anteriores, sin embargo éstas no tuvieron mucho éxito ya que este material se despegaba de la lente con mucha facilidad.

En la actualidad predominan las gafas con junta o sellado de silicona y lente de plástico de policarbonato (PC). La silicona es un material resistente y flexible, se adhiere con facilidad a la piel y es fácil de limpiar. El policarbonato es un material muy resistente a los impactos, soporta grandes temperaturas y es muy transparente.

Pero estos materiales no son los únicos y según el modelo o fabricante se usan diferentes materiales en las distintas partes de las gafas. Así, también podemos encontrar monturas de policarbonato, correas de de neopreno o silicona, sellado de caucho termoplásticos (TPE) y lentes de Acetopropionato de celulosa (CAP). El CAP es un plástico derivado de la celulosa y posee características superiores a otros plásticos, como su flexibilidad, un índice de refracción ligeramente inferior y no causa alergias. Sin embargo, sufren de un deterioro mayor frente a la exposición del medio ambiente.

5. Tratamiento de la lente:

Dependiendo de la cantidad de iluminación donde se van a usar las gafas, deberemos considerar unas cuya lente sea más clara o más oscura. El color de la lente puede variar con las modas, pero existen determinados colores recomendados para uso general o específicos. Si lo que deseas es una visión sin alteración del color y el contraste, puedes optar por un color neutro como el gris o transparente. Las lentes de color verde o marrones están recomendadas para deportes al aire libre, ya que aumentan el contraste con una mínima distorsión del color.

Por otro lado, si nuestro lugar favorito para practicar la natación es al aire libre (piscina de verano, mar, etc.) es muy aconsejable que la lente posea protección contra la radiación ultravioleta UV-A y AV-B solar y así evitar posibles lesiones oculares.

Otro factor que podríamos tener en cuenta es que la lente esté polarizada. La polarización es un tipo de filtro que bloquea, en mayor o menor medida, la luz que viene en una determinada dirección. En las gafas es generalmente una polarización vertical para bloquear los reflejos del sol, procedentes, por ejemplo, del mar.

Un punto negativo de los plásticos, entre los que se encuentra el policarbonato, es que se ralla con gran facilidad, motivo por el cual los fabricantes someten a estas lentes a un tratamiento superficial que permite una relativa mayor dureza.

Otro tratamiento al que son sometidas las lentes de algunas gafas de natación es un proceso antivaho, también denominado "antifog", que evita que se empañen debido a los cambios de temperatura. Sin embargo, la efectividad de estos tratamientos no es eficaz y dura unos pocos baños, motivo por el cual los fabricantes suelen vender como complemento a las gafas sprays o soluciones líquidas antivaho.

Por último, también encontrarás tiendas especializadas y ópticas en las que encontrarás gafas que vienen prefabricadas con la graduación ya montada, y si fuera necesario adaptarán las gafas a tu graduación.

6. Resumen de medidas a tener en cuenta:

  • Evita comprar tus gafas de natación en establecimientos no especializados.
  • Procura, en la medida de tus posibilidades, que las gafas sean de una marca que ofrezca ciertas garantías de seguridad y homologación.
  • Elige el tamaño adecuado según tus necesidades.
  • Pruébate todas las marcas y modelos posibles hasta que encuentres las que mejor se ajusten a tu cara. Haz la "prueba de succión".
  • Si utilizas las gafas en piscina descubierta o en el mar, es muy recomendable que tengan protección contra la radiación ultravioleta UV-A y UV-B.
  • Si quieres tener una visión sin reflejos, busca unas con lentes polarizados.