Saludos. Casualmente hace unas semanas me percaté del tema. A los dos días de hacer un ejercicio con el pullbuoy, en el que mantuve la cabeza rigida -mala postura-, me desperté con mareos y náuseas según de qué lado de la cama me ponía. Eso fue un domingo. Lunes siguiente lo consulté con mi doctora, y me sugirió que dejara de nadar al menos unos días, manteniendo la cabeza en alto, y relajada, pues seguramente se debía a haber forzado las cervicales en el ejercicio. Me asusté, porque ya me monté la película, y dejar de nadar, la verdad, lo lamentaría. Acostumbro a cargar tensión en esa zona, por lo que lo que me ha sido útil es tomar conciencia de que tengo que relajar los hombros, y siempre hacer ejercicios de pre-calentamiento antes de entrar a la piscina.