Lo de la nutrición es toda una ciencia.
Yo me calmo el hambre así, apenas me levanto a las 5:45 me como un plátano y preparo el café. Preparo el desayuno, levanto a mi hijo, desayunamos. A las 6:30 me como mi desayuno normal, un emparedado con pechuga de pavo, o claras de huevo, queso y café con leche descremada, sin azúcar.
Entre llevar al niño a la escuela y llegar a la piscina me dan las 8:30 am.
Tomo muchísima agua antes, durante y después.
Llego a mi casa cerca de las 11:00 am. Meriendo un yogurt, un pedazo de queso, un jugo de naranja, un vaso de leche, una manzana, una galleta, o algo así. (una de estas cosas)
Y luego almuerzo lo que haya. Con las medidas y restricciones que el médico me puso: taza de carbohidratos, siempre escogiendo lo alto en fibras como frijoles, mucha hoja verde, nada frito, nada de azucar.
Eso me mantiene en un estado de saciedad como hasta la media tarde, que vuelvo a picar. Como a esa hora llega mi hijo preparamos galletas con sardina o atún. Aprovecho para tomarme un té verde y si andamos por la calle un capuchino.
Y en la noche ya casi no tengo hambre pero siempre me tomo mi taza de leche o yogurt descremado.