Muchas gracias. Ya me parecía a mi exagerado. Y además, los entrenadores de la piscina nunca me habían dicho nada, excepto por este chico que me dejó un poco dubitativa, la verdad. Tienes toda la razón, Pingüino. Cuando por algún motivo no nado con aletas (casi nunca, alguna vez que me las he dejado o algo por el estilo), la sensación es que no avanzo. Me he acostumbrado tanto a ellas que es que ya no nado con ellas para reforzar piernas y culete, sino porque me encanta. Pues eso, muchas gracias y nadad felices.