Yo no le veo mucho problema.
A esa edad hacía Judo y a veces hacíamos competiciones, y es muy común en otros deportes de equipo, en los que se hacen torneos de distintas categorías.
Si los padres y entrenadores no meten presión, esto se vive con mucha naturalidad. No creo que se pierda la infancia ni suponga estrés para el niño.
Hombre, si a los diez años lo llevas a un centro de alto rendimiento, pues eso ya es otra cosa, pero no creo que sea lo habitual.